No se puede afirmar que comprar vivienda sea mejor que alquilarla; se tendrían que revisar diferentes condiciones asociadas al mercado y las expectativas del contribuyente. Con esto en mente, en este editorial exponemos algunas de las ventajas que debe tener presente quien aún esté indeciso.
En el presupuesto personal de cada contribuyente los rubros destinados a vivienda representan un porcentaje importante de sus egresos, por tanto tomar la decisión de adquirir o alquilar una vivienda puede ser trascendental en el giro que den sus finanzas. En este editorial, mencionamos las ventajas y desventajas de cada opción.
Cabe anotar que no se puede aseverar que sea mejor alquilar o comprar una vivienda, todo depende de las condiciones de vida del contribuyente, el nivel de riesgo que esté dispuesto a asumir, las condiciones del mercado, entre otras situaciones.
Alquiler de vivienda
“Esta opción se le suele recomendar a quienes no están dispuestos a comprometerse con un proyecto a largo plazo”
Esta opción se le suele recomendar a quienes no están dispuestos a comprometerse con un proyecto a largo plazo.
Ventajas
Las ventajas que se presentan al alquilar vivienda son:
Es una buena opción para las personas solteras, ya que pueden ubicar una vivienda cerca de su lugar de trabajo o estudio, y pueden generar un ahorro sobre el presupuesto de gastos de movilidad.
No se requiere de un ahorro significativo para elegir esta opción.
Puede tener acceso a una buena ubicación en la ciudad y a otras condiciones que no podría costear si se decidiera por comprar.
En caso de que existan condiciones externas a la vivienda (vecinos ruidosos, inseguridad, alza de servicios públicos, cambio de empleo), puede desistir de continuar en el predio y elegir otra opción de alquiler que se adecúe a sus necesidades.
No debe asumir los costos de mantenimiento, ni pagar impuestos por la vivienda.
No debe asumir el riesgo de una crisis inmobiliaria en la que el propietario tenga que responder por altos costos derivados de la variación de la UVR.
Disponibilidad de efectivo para invertirlo en algo que pueda resultar más rentable que adquirir una vivienda, como emprender un proyecto o negocio.
No se asumen deudas, ni se adquieren cargos por intereses y costos de préstamo.
Para alquilar se lleva un proceso más simple que para comprar.
No hay peligro de quedar reportado ante las centrales de riesgo.
Compra de vivienda
Se suele recomendar a los contribuyentes que compren vivienda cuando están dispuestos a asumir una obligación a largo plazo.
Ventajas
“Tener una vivienda propia genera estabilidad y seguridad, tanto a nivel personal como al momento de establecer un negocio o adquirir alguna obligación financiera”
Las ventajas que se presentan al comprar vivienda son:
Puede realizar las mejoras y adecuaciones que consideres necesarias.
Llegará el momento en el que salde el total de la deuda adquirida, y tenga todas las ventajas y beneficios derivados del activo. Otro es el caso de quien alquila, dado que, si bien se le permite el disfrute del activo, no posee control sobre este, ni sobre sus riesgos y ventajas.
Se pueden generar ingresos adicionales si se toma la decisión de alquilar parte del predio.
Se está invirtiendo en un activo que tiene un alto grado de certeza de valorizarse.
Tener una vivienda propia genera estabilidad y seguridad, tanto a nivel personal como al momento de establecer un negocio o adquirir alguna obligación financiera.
Generalmente se puede acceder a cuotas por un valor inferior al que se pagaba en alquiler, generando un mayor flujo de caja.
En el momento en que se cancele la última cuota, el dinero que se pagaba se puede destinar a ahorro, o a participación en proyectos o inversiones.
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